Nace de un brazo del río Usumacinta y tiene una extensión de 120 kilómetros hasta su desembocadura en la Laguna de Términos.
Desde finales del siglo XVII ha tenido una gran relevancia como vía de transporte del palo de tinte, con gran impacto en la economía de la región.
En la actualidad es ideal para la realización de actividades ecoturísticas como observación de aves y manatíes, kayak, natación y pesca deportiva y turismo rural.